Experiencias
Más de una década en México: ¿qué ha pasado con el emprendimiento?
Lic. César Villaseñor Islas. 1
En la actualidad es común escuchar en casi cualquier parte la palabra emprendimiento; sin embargo, hace tiempo no tenía mucho significado o relevancia. Por fortuna ¡eso se quedó en el pasado!, puesto que, a partir de los estragos generados por la pandemia del COVID-19, particularmente en México los emprendimientos en el territorio nacional comenzaron a cobrar más y mayor relevancia.
La tecnología y el acceso a la información se aceleró desde el año 2015 y con ello muchos de sus beneficios también, entre ellos, una combinación estratégica entre emprendimiento y tecnología, ya que ambos permiten desarrollar con un mayor impacto la creatividad y la innovación para ofertar soluciones a las necesidades actuales de las sociedades modernas (Arreola, 2014). Compartiré, a continuación, mi experiencia como estudiante dentro de las aulas.
Tuve la fortuna de estar muy de cerca con las grandes empresas tecnológicas del mundo, con iniciativas y comunidades que fomentaban y trabajaban el emprendimiento nacional e internacional, pude generar experiencias y desarrollar conocimientos y competencias que me permitieron aprender para después tener la oportunidad de compartir dicho conocimiento con otros estudiantes con intereses en el emprendimiento.
En el mundo del emprendimiento se menciona de manera reiterada la palabra ecosistema, que puede ser definida como una conformación de diversos actores clave que contribuyen o conforman partes fundamentales para que muchas actividades e iniciativas puedan seguir promoviendo la creación de tecnología de alto valor. Algunos ejemplos de esos ecosistemas:
- Incubadoras: InnovaUNAM, Instituto Eugenio Garza Lagüera, CETIEM
- Aceleradoras: MassChallenge, 500 Startups México
- Fondos de inversión: Angel Ventures
- Hubs de innovación: Impact Hub, The Pool, We Work
- Clúster de tecnología: Clúster de Innovación Vallejo, Clúster Durango
- Comunidades: Student Clubs Google y Microsfot, entre otras.
Durante los últimos ocho años he dedicado mi trayectoria profesional al desarrollo e implementación de estrategias para promover el emprendimiento universitario en diversas instituciones tanto públicas como privadas, experiencias en las que he tenido la oportunidad de ver de primera instancia la evolución que han registrado los emprendimientos universitarios; de observar los muchos cambios en los proyectos de innovación, y también he sido testigo de la transformación del alumnado, el profesorado y demás profesionales relacionados con los proyectos de emprendimiento. Es por demás motivante ser parte del proceso de enseñanza y de aprendizaje de las nuevas generaciones con intereses en el emprendimiento universitario, ya que este representa un camino adicional que pueden elegir para complementar sus carreras profesionales, emplearse y ofrecer empleo a otros universitarios.
Las tecnologías de tendencia como el Big data, la Inteligencia Artificial (IA), NFT´s, entre otros, son solo algunos de los ejemplos que los emprendimientos universitarios están ocupando para crear nuevos modelos de negocio que se adapten a las necesidades de consumidores más informados (Speranza, 2022).
Algunas de las creencias muy arraigadas en cuanto al emprendimiento de un negocio son:
- Se necesita mucho dinero para emprender y arrancar un negocio
- Se necesitan muchos contactos y muchas conexiones para emprender
- Necesitaré una gran plantilla de personas para poder operar el negocio
Sin embargo, estas creencias no siempre son ciertas y no corresponden a todas las ideas de negocio. La aplicación de herramientas, metodologías y técnicas también juegan un papel importante en todo esto, y constantemente se están haciendo mejoras para ser utilizadas en el mundo empresarial e institucional, muestra de esto son las empresas denominadas startups que son precisamente aquellas organizaciones que se encuentran en crecimiento y desarrollo.
En concordancia con la experiencia desarrollada en el área de emprendimiento universitario comparto el siguiente decálogo del emprendedor:
- ¡Investiga! Haz tu tarea: deberás conocer y reconocer lo que ya existe acerca de tu negocio
- Indaga acerca de tus posibles clientes: deberás conocer a quién va dirigido tu producto o servicio y tener mucha claridad acerca de tus consumidores
- Resuelve una necesidad real: aporta valor y resuelve problemas
- Busca aliados y colaboradores: no emprendas solo, forma un equipo de trabajo que te apoye
- Adopta una tecnología: busca las tendencias en el sector y suma esfuerzos
- Desarrolla un modelo de negocio: la estructura básica de un negocio BMC (Business Model Canvas)
- Genera un producto o servicio mínimo viable. Consejo: ¡no esperes que sea perfecto la primera vez!
- Realiza sesiones de retroalimentación con tus clientes: aprende a escuchar sus necesidades, los grupos de enfoque serán tu mejor aliado
- Los números serán clave en tu negocio: conoce a detalle las finanzas de tu emprendimiento para tomar mejores decisiones
- Mejora continua. Recuerda: lo que se mide se puede mejorar. ¡Define métricas e indicadores para evaluarte!
Siguiendo este decálogo podrás identificar que te será de mucha utilidad para desarrollar cualquiera que sea la idea de negocio que tengas en mente. Estos sencillos pasos te ayudarán a tener un emprendimiento más estructurado y verás que cada punto sumará al éxito en la implementación de tu emprendimiento; sin embargo, es importante también mencionar que el camino no será sencillo y que no existe una receta infalible. Te enfrentarás a diversos factores o situaciones que no podrás eliminar, pero sí controlar o disminuir su impacto negativo, por lo que ¡te invito a experimentar tu propio proceso al emprender!
Desde mi perspectiva ─al paso de 14 años─ se han registrado avances importantes en materia de emprendimiento universitario, ya sea desde conocimientos más especializados, desarrollo de componentes de innovación, promoción de fondos de inversión en etapas tempranas de emprendimiento, hasta la inversión más alta para los startups con potencial a crecer sus negocios a más lugares.
Todos estos avances quizás muy pocos los conozcan, pero han sido sustanciales; sin embargo, ocurre algo importante, y es que como parte de las múltiples consecuencias que generó la pandemia por COVID-19 está la pausa que desaceleró el flujo mundial de actividades de emprendimiento, entorpeciendo el avance de algunas iniciativas, cuya repercusión es que el alumnado y el profesorado se encuentran ─en algunas ocasiones─ muy distanciados o perdidos en temas de emprendimiento.
Enseñar el emprendimiento desde las aulas universitarias quizás puede parecer complicado o hasta imposible, pero se puede alcanzar con ayuda de aliados estratégicos que contribuyen con los temas más a la vanguardia, solo es cuestión de colocar a los tomadores de decisiones en el tiempo y lugar correctos e ideales para detonar esa oportunidad; un aspecto fundamental de esta propuesta parte de los docentes, quienes deben estar en constante capacitación en cuanto a los requerimientos de los mercados laborales actuales.
De acuerdo con García–Bullé (2014), en el tema del emprendimiento se habla de una cooperación entre tres actores principales: la academia, las empresas y el gobierno, los cuales deben estar en constante comunicación para que existan y se promuevan proyectos estratégicos que sumen a la creación de nuevas y mejores empresas, dotando a las y los universitarios de competencias que les permitan vencer los temores o miedos al rechazo al momento de emprender.
Uno de los principales problemas es que muchos de los estudiantes desconocen las iniciativas y los términos que rodean al ecosistema emprendedor, de la misma manera el profesorado también es corresponsable de promover proyectos académicos y escolares con una salida a convertirse en startups, ya que es una práctica que en ocasiones es olvidada dentro de las aulas. Otro inconveniente es que las empresas tanto nacionales como extranjeras no están otorgando tanta inversión al país para la creación de más y nuevos negocios de alto impacto.
Sin duda es algo por lo que durante este año muchos de los actores estaremos enfocando esfuerzos en seguir promoviendo actividades que contribuyan a ese flujo emprendedor al desarrollar y proponer diversas actividades: talleres, cursos, capacitaciones, congresos, hackáthones y demás; una invitación para la juventud con intención de emprender es buscar toda esta información en internet, tomando como base diversas fuentes tales como las universidades, las propias empresas, las incubadoras, las aceleradoras para que puedan tener acceso a estos y muchos más recursos (Vázquez, 2020).
Con los grandes avances registrados en la aplicación de la tecnología se podrá recuperar el tiempo puesto en pausa ocasionado por la pandemia, se podrá poner en práctica lo aprendido hasta el momento e innovar en las nuevas formas que todas las personas tenemos a raíz de esta era postpandemia.
Mi recomendación a toda persona lectora de este texto será que, si ya tienen un emprendimiento, se acerquen a los aliados estratégicos para que puedan alcanzar más y de mejor forma sus objetivos, y si aún no tienen un proyecto en mente, la invitación será a que conozcan quiénes somos las personas, organizaciones e instituciones que estamos realizando actividades de emprendimiento para que puedan mejorar sus habilidades y adquirir nuevas.
A más de una década de emprendimiento universitario se puede decir que todavía no se han alcanzado los mejores resultados que podrían llegar a lograrse si se le otorga un buen aporte de herramientas y oportunidades de conexión, por lo que si tienen alguna idea de negocio ¡atrévanse a emprender!
Arreola, J. (2014). Las universidades y su impacto en el emprendimiento en México. Forbes México. https://www.forbes.com.mx/las-universidades-y-su-impacto-en-el-emprendimiento-en-mexico/
García-Bullé, S. (2019). El emprendimiento como recurso y agente de cambio en la educación. Observatorio. Instituto para el Futuro de la Educación; Instituto para el Futuro de la Educación. https://observatorio.tec.mx/edu-news/emprendimiento-y-educacion/
Speranza, V. (2022). El futuro del emprendimiento en México y una historia de dos décadas. Tec Review. https://tecreview.tec.mx/2022/03/18/emprendimiento/futuro-del-emprendimiento-en-mexico/
Vázquez, J. (2020). Las 6 cosas en las que todo emprendedor debe mejorar. CETIEM SC. https://cetiem.com/las-6-cosas-en-las-que-todo-emprendedor-debe-mejorar/